¿Qué es el acabado de revestimiento de brida?
Los requisitos de la norma ASME B16.5 para el acabado del revestimiento de bridas deben cumplir con los párrafos 6.4.5.1 a 6.4.5.3, salvo que se puedan proporcionar otros acabados mediante acuerdo entre el usuario y el fabricante. El acabado de las superficies de contacto de la junta se evaluará mediante comparación visual con las normas Ra (véase ASME B46.1) y no con instrumentos con palpadores y amplificación electrónica. ¿Qué es el acabado del revestimiento de bridas?
El acabado del revestimiento de una brida de tubería, según ASME B16.5, se refiere a la suavidad o rugosidad de la superficie de revestimiento, que está en contacto directo con la junta en una unión de brida atornillada.

Tipos de acabado de refrentado de bridas
Los acabados principales para las bridas ANSI B16.5 incluyen acabado estándar, acabado dentado en espiral, acabado dentado concentrado y acabado liso.
Acabado de stock
Este tipo de acabado superficial de brida se utiliza ampliamente debido a su idoneidad para la mayoría de las condiciones de servicio normales. Al comprimirse, la cara blanda de la junta se moldea en este acabado, creando un sello y una alta fricción entre las superficies de contacto.
Para bridas de hasta 12 pulgadas, el acabado se crea con una herramienta de punta redonda de 1,6 mm de radio y un avance de 0,8 mm por revolución. Para bridas de 14 pulgadas o más, se utiliza una herramienta de punta redonda de 3,2 mm y un avance de 1,2 mm por revolución.

Acabado dentado en espiral
Se trata de una ranura espiral continua o fonográfica, pero difiere del acabado original. La ranura se genera típicamente con una herramienta de 90 grados, creando una geometría en "V" con dentados en ángulo de 45 grados.
Acabado dentado concentrado
Como su nombre indica, este acabado se compone de ranuras concéntricas. Se utiliza una herramienta de 90 grados y las estrías están distribuidas uniformemente a lo largo de la cara.


Acabado liso
Este tipo de acabado debe mostrar visiblemente las marcas de la herramienta. Se utiliza comúnmente para juntas con revestimientos metálicos, como juntas de doble camisa, acero plano y metal corrugado. Las superficies lisas deben encajar firmemente para crear un sello, dependiendo de la planitud de las caras opuestas. Esto se logra generalmente creando una ranura espiral continua (a veces llamada fonográfica) en la superficie de contacto de la junta utilizando una herramienta de punta redonda de 0,8 mm de radio, a una velocidad de avance de 0,3 mm por revolución y una profundidad de 0,05 mm. Este proceso dará como resultado una rugosidad de Ra de 3,2 a 6,3 micrómetros (125-250 micropulgadas).

Acabados de revestimiento de bridas de acuerdo con ASME B16.5.
Tipos de superficies | Valor máximo de rugosidad |
Bridas de unión tipo anillo (y juntas duras) | 63 µpulgadas AARH (1,6 µm AARH) |
Juntas enrolladas en espiral. | 125 a 250 µin AARH (3,2 a 6,3 µm AARH) |
Juntas blandas. | 250 a 500 µin AARH (6,3 a 12,6 µm AARH) |
Machihembrado y machihembrado, macho y hembra pequeños | 125 µ.pulg. o 3,2 µ.m AARH |
Preguntas frecuentes
El acabado de la cara de la brida influye directamente en la capacidad de sellado de la junta. Un acabado adecuado garantiza que la junta se deforme para rellenar las imperfecciones de la superficie, creando un sello hermético que resiste las condiciones de funcionamiento previstas.
El acabado del revestimiento de la brida se mide utilizando un perfilómetro, que traza la superficie para cuantificar la rugosidad, expresada como Ra (rugosidad promedio) en micrómetros (µm) o micropulgadas (µin).
- Para juntas metálicas (por ejemplo, enrollado en espiral), generalmente se recomienda un acabado dentado.
- Para juntas blandas (por ejemplo, PTFE, caucho), es adecuado un acabado más suave como el estándar o el acabado liso.
- Tenga en cuenta la presión de operación, la temperatura y la compatibilidad química del acabado de la brida con el material de la junta.
Generalmente, ambas bridas de una conexión deben tener el mismo tipo de acabado para asegurar un sellado adecuado. Los acabados desiguales pueden provocar problemas de sellado o fallas en la junta.
Demasiado rugoso: una superficie rugosa puede provocar un desgaste excesivo de la junta, lo que genera un sellado deficiente y posibles fugas.
Demasiado lisa: una superficie muy lisa puede no sujetar bien la junta, lo que provoca deslizamiento y un sellado inadecuado, especialmente bajo presión.
La inspección y el remecanizado regulares pueden mantener la integridad de la cara de la brida. Con el tiempo, la erosión, la corrosión o los daños mecánicos pueden afectar el acabado y comprometer el sellado.
En resumen
Comprender los acabados de las bridas es fundamental para seleccionar la junta correcta, garantizar un sellado adecuado y mantener la integridad general de las conexiones de las bridas en diversas aplicaciones.
Referencias de recursos relacionados:
https://www.wermac.org/flanges/flanges_stock-finish_smooth-finish.html